Tu perfil es tu tarjeta de presentación ¡cúrratelo!
Vamos a comenzar por cosas básicas: tu foto de perfil. Elige una foto en la que se te vea bien, nítida, atractiva, «que entre por el ojo».
Tu nombre de usuario: esto requiere que le dediques un poco de tiempo antes de elegirlo. Una buena estrategia es que te ayude a clasificarte en un tipo u otro de influencer, que sea fácilmente recordable, que no sea complicado a la hora de escribir,…
¿Tienes puesta tu localización? No hace falta indicar tu calle, pero al menos tu ciudad o región. Así evitarás que la empresa tenga que contratar un equipo de investigación para saber dónde te ubicas 😉
Ahora en serio, para campañas locales o que requieren presencia física, a veces las empresas se vuelven locas y pierden mucho tiempo en descubrir de dónde es un perfil. Y ya sabes, el tiempo es oro.
Contacto. Puede que en un primer contacto una empresa use el mensaje privado, pero en muchas ocasiones elegirán el email para poder detallarte mejor la información, adjuntar archivos,… Puedes indicarlo en tu bio o en los ajustes de la red social.
¿Te has parado a pensar un poco en el texto de tu biografía o has escrito lo primero que se te ha pasado por la cabeza? Es un texto muy corto pero que dice mucho de ti. Quizás una empresa no se tome el tiempo de entrar a revisar todas tus publicaciones y se guíe por tu biografía ¡no desaproveches esa oportunidad!
Cosas que te recomendamos a la hora de redactar tu biografía en una red social:
- Utiliza palabras clave. Ayuda a las empresas a encontrarte. ¿Te suena el acrónimo SEO? Si quieres en otro post te hablamos del SEO para influencers.
- Usa emojis. Siempre le darán un toque divertido y cercano a tu perfil.
- Usa hashtags, esty te ayudará a aparecer en búsquedas. #Pero #porfavor #no #abuses #de #ellos #todo #en #su #justa #medida.
- Redacta una bio que te defina. Intenta responder a cosas como: quién eres, qué haces, qué te interesa, qué ofreces,…
¿Quieres dar más información sobre ti? Te recomendamos usar páginas Linktr.ee en la que puedes integrar varios links. Así puedes llevar las visitas hacia otras redes sociales, artículos en los que sales, portfolio, blog,…
Cuida tus historias destacadas. Estas pueden ser un buen escaparate y resumen de tu contenido. Recuerda que el tiempo es oro, y las empresas no van a estar scrolleando para ver todo tu contenido.
Y… Ya tienes bastante trabajo por delante así que ¡manos a la obra!