Dicen que la venganza se sirve fría, y si detrás hay una buena estrategia de marketing y se puede sacar rédito profesional ¡mejor que mejor!
Y si no que se lo digan a Shakira: esta mañana muchos nos hemos tomado el café leyendo en twitter la aparente relación entre su último lanzamiento, ‘Monotonía’, y su sonada separación con el archiconocido futbolista Piqué. ¿Casualidad? Don’t think so!

Después de 5 meses de su ruptura, a comienzos de octubre Shakira anuncia nuevo single y desde su cuenta de Instagram lanza píldoras para dar pistas sobre lo que se venía, generando lo que más se desea ante un lanzamiento: ¡expectación!
3 imágenes seguidas con las frases: «No fue culpa tuya…», «Ni tampoco mía», «Fue culpa de la monotonía».
Una animación de un corazón sangrando atravesado por un chuchillo.

Y, sin duda, el plato fuerte: el vídeo un hombre pisando un corazón.

¿A alguien le queda alguna duda de que el desamor va a ser el protagonista de este single? Y también la artista ha aprovechado para lanzarle unos dardos envenedados a Piqué con frases como: “Yo te quiero, pero es que yo me quiero más a mí”, ”Te olvidaste de lo que un día fuimos”, “me dejaste por tu narcisismo”,…
¿Resultado? Éxito del single en sus primeras horas de lanzamiento, ‘Monotonía’ en boca de todos y sus notas bachateras repitiéndose en nuestra cabeza, cientos de artículos sobre la canción y su aparente relación con la separación de la pareja, tendencia en redes sociales,…
Nos quitamos el sombrero frente a la cantante: excelente ejemplo de cómo sacar rendimiento a un hecho negativo, trabajar su reputación en un momento en el que se encuentra dañada por temas fiscales, ganarse el foco desde el primer momento del lanzamiento y… Algo muy animal cuando uno ha sido herido: ¡vengarse!
Y como «es de bien nacido ser agradecido», rápidamente Shakira ha hecho llegar su agradecimiento a sus seguidores apelando a la emotividad.
